Si estás leyendo esto, probablemente te pasa como a nosotros: vas a muchísimos eventos y no en todos sientes algo. No en todos te sorprenden o no tienen ese efecto wow. No de todos te acuerdas. Y queremos darte algunas ideas para que no pase lo mismo con el que estás planeando, learnings que hemos sacado después de más de 16 años organizando eventos corporativos, congresos, conciertos, festivales, team buildings y mucho más. No es que seamos muy creativos -aunque un poco sí lo somos-, es que hemos trabajado mucho para llegar hasta aquí.
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Antes de empezar, ¿qué es el efecto wow?
Este término anglosajón llegó a nuestro país de la mano del marketing experiencial, y es que el efecto wow define la capacidad de sorprender al cliente / asistente con una experiencia inesperada, sorprendente, impactante. ¿El objetivo? Perdurar, diferenciarse, destacar, hacerles sentir algo nuevo. Un interesante estudio internacional titulado World Happiness Report, demostró que el 73% de los recuerdos vívidos son, o bien experiencias primarias, o sucesos únicos: “Las experiencias extraordinarias y nuevas están sujetas a un mayor procesamiento cognitivo elaborativo, y normalmente se consolida más cuando las emociones han sido más intensas. Si en una situación concreta aumenta la emoción de una forma intensa, el cerebro acumulará los datos con más facilidad”.
Así que ya sabes: si quieres perdurar en el top of mind de tus clientes o público, tendrás que darles algo nuevo, algo que no hayan visto ya. Y a continuación te sugerimos 5 ideas que a nosotros nos funcionan muy bien para lograrlo. No hablamos de grandes presupuestos de producción -así lo puede hacer cualquiera- sino de los conceptos que te ayudarán a hacer una buena planificación.
1. Actores camuflados.
En el escenario, puede pasar cualquier cosa… lo raro es que suceda entre el público. Por eso si organizas un festival, convención, etc. donde la atención está bajo los focos, te proponemos que sorprendas a los invitados con una performance ya sea individual o de grupo que transmita exactamente aquello que quieres transmitir, y además bien de cerca. Nosotros lo hemos hecho con activaciones de patrocinios (en la foto puedes ver un ejemplo de Ecoembes para un festival de música), dinamización de eventos corporativos, etc. y siempre ha funcionado este efecto wow. ¿Por qué no a ti?
2. Mejor en las distancias cortas
Enlazando con lo que decíamos arriba, las cosas tienen un efecto MUCHO mayor cuando se viven de cerca. Por eso muchas veces funciona mejor un mago entre el público que un espectáculo descomunal sobre el escenario; por eso cuando los artistas bajan al público comienzan los nervios por si se acercará a nosotros (sí, y por eso la gente hace colas durante días para conseguir las primeras filas, la experiencia es totalmente distinta); por eso un minuto de networking con una persona puede ser más productivo que ver 6 horas de videos suyos. Acerca la experiencia a la gente, y tendrás medio trabajo hecho.
3. Convierte en protagonistas a l@s asistentes.
Todos hemos visto grupos famosos sobre el escenario, incluso imitadores de esos grupos sobre el escenario… pero pocos han visto a la directora de recursos humanos de su empresa cantando sobre el escenario. Y eso sí que es un efecto wow y es precisamente lo que consigue nuestro Live Karaoke: que el 100% de los asistentes se sientan rockstars por un día. Pues eso mismo se aplica a cualquier evento: no les hagas probar un plato porque por muy elaborado que esté no les sorprenderá… ¡enséñales a prepararlo! No les regales nada por Navidad… ¡dale ideas para que sorprendan a sus compañer@s con algo único!
4. Descólocalos.
Pero en el buen sentido: todos recordamos los espectáculos de La Cubana en los que al llegar nos decían que habíamos llegado tarde y la obra había terminado o aquel en que convertían la platea en una iglesia y a los espectadores en testigos de boda… o la también famosa ‘Noises off’ donde el decorado se da la vuelta y de repente lo que vemos es la obra entre bastidores. Puedes conseguir un efecto WOW deslumbrante simplemente trabajando bien tu decoración (¿lo que ves es la realidad?), tu equipo de dinamización (¿qué papel juego en este evento realmente?), tu escaleta (¿y si empiezas por el final?), o cualquiera de los elementos que conforman tu evento.
5. Deja lo mejor para el final.
¿Te has preguntado alguna vez por qué las grandes bandas siempre tocan al final del festival? ¿Por qué preferimos las pelis con un final feliz a las que no las tienen? ¿Por qué los grandes restaurantes cuidan tanto el postre? Pues el psicólogo y premio Nobel Daniel Kahneman sí que lo hizo, y descubrió algo llamado el “momento de codificación”, un sesgo estudiado por el que nos empuja a valorar más positivamente aquellos acontecimientos con un final feliz, independientemente de lo que haya pasado hasta entonces. Así que sea cual sea tu mejor carta, si quieres lograr la mejor versión del efecto WOW… mejor resérvala para la última mano.
Si quieres saber más o necesitas un cable para llevar a cabo efectos wow originales y que sorprendan a todos, contáctanos y vemos qué podemos hacer. Sin compromiso.
